El
Norte / Valladolid
Este año en el que se conmemora el sesquicentenario
de la salida del primer número de El Norte de
Castilla, acontecimiento que tuvo lugar el 17 de octubre
de 1856, el pleno del Ayuntamiento de Valladolid en
la sesión que tiene lugar en el mes que coincide
con la efemérides, tiene la ocasión de
mostrar su reconocimiento a la labor desempeñada
a favor de la ciudad durante 150 años.
Una de las posibilidades de articular, de plasmar o
de formalizar este reconocimiento hacia un medio de
comunicación tan íntimamente ligado a
la historia de la ciudad, es concederle una distinción
de su Ayuntamiento por sus especiales merecimientos,
logrados gracias a la prestación de servicios
extraordinarios al Municipio de Valladolid, conforme
prevé el Reglamento de distinciones de este Ayuntamiento.
Si como establece dicho reglamento debemos acreditar
las razones, méritos o servicios prestados a
nuestra ciudad, y que nos impulsan a presentar nuestra
más alta consideración, bastaría
con acercarnos a la extensa hemeroteca del diario.
Imposible sería por tanto recoger en unas pocas
palabras de este documento-memoria lo que significan
para Valladolid 150 años de historia común,
de historia contada, de historia íntimamente
vivida.
Simplemente diremos que El Norte de Castilla tiene el
excepcional privilegio, ganado con rigor, constancia
y vocación de servicio, de ser el testimonio
de un siglo y medio de historia de Valladolid, gracias
al trabajo y dedicación de los profesionales
que han dejado su buen hacer tras sus páginas.
Por esa razón, Valladolid puede contar hoy con
una memoria escrita y fotográfica de su realidad
histórica, de su transformación, de los
errores cometidos, de los problemas a los que se enfrentó,
de sus logros y de sus pequeñas y grandes historias.
Y es que desde sus orígenes El Norte de Castilla
ha estado firmemente unido a nuestra ciudad, y ha sido
testigo de lo que en ella ha acontecido, contando para
ello con el valor añadido de grandes firmas como
la de los reconocidos escritores, Miguel Delibes, que
además fue en una época su director, Jiménez
Lozano, Francisco Umbral o Félix Antonio González,
que igualmente lo dirigió, (y para quien pediremos
la Medalla de Oro al Trabajo en este mismo Pleno) y
sobre todo, gracias al empeño de empresarios,
directivos, periodistas, fotógrafos y trabajadores
que han hecho posible que El Norte de Castilla lleve
150 años relatando el día a día
de nuestra ciudad, puntual a su cita con los lectores
y medio de comunicación escrito de referencia
para ellos.
Durante todo este tiempo ha demostrado un gran compromiso
con Valladolid y sus gentes, siendo fiel reflejo de
sus inquietudes económicas, culturales, políticas
y sociales y ha estado siempre muy atento a las transformaciones
que en el último siglo y medio ha vivido nuestra
ciudad.
Pero no sólo es encomiable su inigualable labor
informativa en los campos social o político,
la atención a la información agraria,
y la contribución a la conservación de
nuestras tradiciones, sino también la tarea que
nos ha permitido el acercamiento y el disfrute de las
manifestaciones culturales desarrolladas en Valladolid,
y la apuesta decidida por nuestros artistas, pintores,
escultores, actores, escritores, así como por
aquellos valores, hombres y mujeres vallisoletanos que
de uno u otro modo se han distinguido en algún
campo, y a quienes desde sus páginas, siempre
han apoyado.
Especial énfasis en el reconocimiento merece
también su significada atención a la pequeña
y gran historia del deporte Vallisoletano, al de élite,
junto con quien hemos festejado los éxitos y
llorado los fracasos y al de base, por el puntual seguimiento
de los quehaceres de nuestros jóvenes deportistas.
No hay que olvidar tampoco que su atenta mirada a la
vida municipal de esta Casa Consistorial ha contribuido
al acercamiento de ésta a los ciudadanos.
Este aniversario nos concede la ocasión –como
es habitual en las conmemoraciones– de volver
la vista atrás, y de detenernos a reflexionar
sobre lo que ha significado El Norte de Castilla para
todos nosotros, pero no lo olvidemos, también
nos ofrece la posibilidad de mirar hacia adelante porque,
a lo largo de su existencia este periódico siempre
ha sabido transformarse, modernizarse y adaptarse a
las exigencias de los nuevos tiempos. Se ha reinventado
continuamente en estos 150 años, lo cual nos
conduce a una visión de futuro con optimismo,
porque sabemos que este tenaz observador permanecerá
atento a los acontecimientos y futuros retos a los que
se enfrenta Valladolid.
El hecho de que Valladolid cuente con uno de los pocos
diarios en Europa que ha visto la luz de forma ininterrumpida
a lo largo de un siglo y medio no es fruto de la casualidad,
sino una prueba de su capacidad de liderazgo y puesta
al día gracias a la que ha sabido conservar inalterable
su espacio, en un mundo de fuerte competencia en los
medios de comunicación.
Por ello, por una vida al servicio del devenir cotidiano
de Valladolid en los últimos ciento cincuenta
años, por no cesar en su empeño de saber
escuchar y saber transmitir, por su puesta en valor
y compromiso con sus gentes, la ciudad está en
deuda con El Norte de Castilla y para agradecérselo,
el Excelentísimo Señor Alcalde de Valladolid
propone al Ayuntamiento– Pleno que se adopte el
siguiente:
ACUERDO:
Conceder la Medalla de Oro de la Ciudad, distinción
que se otorga a toda aquellas personas o entidades,
en las que concurren, con carácter muy sobresaliente,
el mérito en la prestación de servicio
a la ciudad de Valladolid, en los términos previstos
en el Reglamento de Distinciones del Ayuntamiento de
Valladolid al diario El Norte de Castilla, por su ininterrumpida,
firme y exitosa labor informativa durante 150 años
al servicio de Valladolid y sus gentes.
Valladolid a 25 de septiembre del 2006
EL ALCALDE
Francisco Javier León de la Riva.
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