Viaje al interior de uno mismo |
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MARÍA AURORA VILORIA
Cuando se pregunta a José Jiménez Lozano por su extraordinaria facilidad para escribir que le permite dar a la imprenta por lo menos dos títulos por año, contesta, con su especial manera de quitar importancia a las cosas, que porque empezó a publicar tardiamente. Como si eso justificase la prisa por contar todo lo que le bulle por dentro. Así, ha conseguido estar ahora, cuando va a cumplir 73 años, en un extraordinario proceso creativo que dura ya más de dos décadas. Un camino que el escritor y periodista inició en 1971 con 'Historia de un otoño, la novela en la que estaban ya las bases -los asuntos, diría él- de su obra literaria, aquí narrados a través de la rebelión de las monjas de Port Royal en el siglo XVII Porque quien fuera encasillado durante un tiempo como un escritor católico -por aquello de la moda de Bernanos y Julien Green-, ha manifestado siempre, en novelas, artículos, cuentos o ensayos, una rebeldía que le obliga a oponerse a la decisión de cualquier poder, sea eclesiástico o civil, si va en contra de su conciencia o de su libertad interior. Y eso es lo que hacen, de una u otra forma, los numerosos personajes de su galería literaria, todos completamente distintos y, al tiempo, muy parecidos. Quizá porque a través de ellos se ve nada más y nada menos que al hombre y sus cosas. Por eso abrir sus libros es como iniciar una aventura que, a través de otras vidas, nos permite descubrir lo que hay en el interior de nosotros mismos. A Jiménez Lozano le gustan además las cosas sencillas -él es muy frugal-, porque cree que son las verdaderamente importantes. Y de eso hablan sus libros, por lo que se asoman muchas veces esa infancia que salva de los golpes de la vida y, por supuesto, sus raíces. Nacido en 1930 en Langa, este abulense reconvertido en vallisoletano sin renunciar a su tierra natal vive desde hace muchos años en Alcazarén esa existencia pausada que permite conocer el color de las estaciones y terminar la jornada con la charla y el paseo nocturno. Licenciado en Derecho, Filosofía y Letras y Periodismo por las Universidades de Valladolid, Salamanca y Madrid, inició su labor periodística como colaborador en El Norte de Castilla en 1958 y en 1962 entró a formar parte del equipo que reunió Miguel Delibes, entonces director del periódico, para realizar unas páginas culturales semanales y del que formaron parte jóvenes promesas que han sido luego grandes escritores. Enseguida empezó a escribir artículos, algunos desde el Concilio Vaticano II, al que asistió como invitado. Especializado después en editoriales y comentarios de política internacional, ocupó luego los cargos de subdirector y de director desde 1992 hasta su jubilación, en 1995. Actualmente, además de colaborar en otras publicaciones, escribe un artículo semanal en El Norte de Castilla y por uno de ellos, titulado 'Sobre el español y sus asuntos', fue galardonado en diciembre de 2000 con el V Premio Nacional de Periodismo Miguel Delibes. A aquella primera novela sobre el jansenismo pronto siguieron otras, como 'El sambenito' 'La salamandra', 'Duelo en la casa grande', 'Sara de Ur' o 'El mudejarillo', que tuvo un extraordinario éxito y fue llevada al teatro. En ella trazaba a su manera la vida de Juan de la Cruz, un santo que, junto con Teresa de Jesús, aparece en muchos de los escritos de un autor que logra expresar el misticismo a través de lo esencial y la ausencia de cosas superfluas. Otros títulos son 'La boda de Ángela', 'Teorema de Pitágoras', 'Los compañeros', 'Ronda de noche', 'Las señoras', 'Un hombre en la raya' o 'El viaje de Jonás', su última novela, publicada en noviembre de 2002 y con la que vuelve a Oriente para recrear a un personaje bíblico. Entre sus libros de cuentos están 'El santo de mayo', 'El grano de maíz rojo'. por el que recibió el Premio de la Crítica en 1988, o 'El cogedor de acianos'. También ha escrito cuatro diarios, 'Los tres cuadernos rojos', 'Segundo abecedario', 'La luz de la candela' y 'Los cuadernos de letra pequeña', editado en marzo de 2003, por los que desfila la vida cotidiana y en los que descubre los entresijos de la creación literaria. Ha publicado además poesía, 'Tantas devastaciones', 'Un fulgor tan breve', 'El tiempo de Eurídice' y 'Elegias menores', su último poemario, editado en 2002. Jiménez Lozano es autor además de ensayos, como 'Un cristiano en rebeldía', editado en 1963; 'Retratos y soledades', 'Los cementerios civiles y la heterodoxia cristiana', 'Sobre judíos, moriscos y conversos', 'Guía espiritual de Castilla', 'Los ojos del icono' para Las Edades del Hombre, que ideó junto con José Velicia y de las que fue guionista, y 'Fray Luis de León', el último. En 1989 fue galardonado con el Premio Castilla y León de las letras «por su personalísima actualización de la tradicional cultura castellanoleonesa». El jurado destacó también la labor del escritor en la investigación «de la historia de la espiritualidad» así como su «creación de novelas que unen la herencia española con las más actuales corrientes europeas». Jiménez Lozano ha recibido además el Premio Nacional de las Letras Españolas de 1992, el Provincia de Valladolid a la trayectoria Literaria de 1996 y la medalla de oro al Mérito en las Bellas Artes. El 12 de diciembre de 2002 fue galardonado con el Premio Cervantes, el nobel de las letras en español, que recibió el 23 de abril de 2003 de manos del Rey Juan Carlos en un solemne acto que acogió la Universidad de Alcalá de Henares y en el que el escritor pronunció un discurso sobre el autor de 'El Quijote'. |